La elección del local fue al libre albedrío. Dejamos el coche en la avenida de la estación y comenzamos a andar para ver a dónde ibamos. No nos conformamos con los sitios que conocíamos de la zona y decidimos buscar un local que no fuese uno de nuestros habituales, y allí estaba Casa Cantabria / Bodega Cuentavinos.
El local es un local amplio, con una barra central grande y para nuestra suerte, sin mucha gente, como a nosotros nos gusta un San Martes.
Lo primero que nos encontramos es una abrumadora carta de tapas que no sabes por dónde cogerla, el tamaño es XXL, pero cuando la lees, entiendes el por qué. ¿Qué demonios te pides? Hay una enorme variedad de tapas, tanto de las típicas de aquí, como tapas del norte, tapas gourmet y especiales.
Para empezar con buen pie y para probar si el local hace honor a su nombre, Maricruz pide un Ribera del Duero, Vegazar Roble y para mi, mi típico mosto. Esta vez un señor mosto Greip, me atrevería a decir sin tan siquiera preguntar. ¿Que decir de la bebida? Pues un acierto en toda regla en ambos casos.
La primera tapa, para probar en nivel de cocina, debe ser una ensaladilla rusa. En este caso, una tapa generosa, bien presentada, de textura cremosa y sabor muy digno, pero no perfecta. El sabor se iba diluyendo con cada nuevo bocado, con lo cual, no es mi tipo de ensaladilla perfecta, aun así...NOTA: 7
Maricruz escogió una brocheta de salchicha Bratwurst con pimiento que resultó espectacular, muy bien acompañada. Combinación esquisita pasada por la brasa. Que conste que nos declaramos amantes de este tipo de salchichas.
NOTA: 7
Yo iba rompedor esa noche y si la primera fue sota, la siguiente fue caballo. Cazón en adobo. Para mi gusto, no estaba todo ácido que a mi me gusta y tiraba mas bien a sabor flojete. Los he probado mejores. Simplemente correcto.
NOTA: 6
Maricruz escogió la tapa que resularía ganadora esa noche: Picadillo castellano con tomate. Una tapa original que no se ve por estas tierras y con un sabor intenso. Tapa contundente y sabor intenso, con una mezcla de carne muy apropiada.NOTA: 8
Nuevamente me tocó el turno y si antes fue la sota, luego el caballo, ahora tocaba el rey. Croquetas caseras. Lástima que el Rey debía ser un Borbón de los nuestros, porque yo me llevé el fiasco de la noche. Una tapa muy normalucha a la que le faltaba el sabor. La nota me recordó a esos periodos escolares en los que los profesores se debatían entre el aprobado o el suspenso. Como devorador de croquetas en el pasado...
NOTA: 4.5 (con guarnición quizás hubiese llegado al 5) Necesita mejorar.
Maricruz volvió a acertar con otra tapa del norte. Queso Divirín (queso fundido de cantabria).
Una combinación excelente de queso fuerte fundido y cebolla caramelizada.
NOTA: 8
Así que el resultado en cuanto a tapas queda así:
Tapa WIN: Empate de las tapas del norte del picadillo castellano con tomate y la tapa de Queso Divirín. Fueron las triunfadoras de la noche.
Tapa FAIL: Las croquetas caseras ¡¡Llamando al sabor!! ¡¡Llamando al sabor!!
Una vez terminada la comida, analicemos el local. Es un sitio muy acogedor, muy bien decorado, con una acústica muy buena, peeeeeero...... ¿Qué pasa con la música? Una selección musical que nos metía de lleno en 2010. ¿Sube la mano y grita gol? queremos creer que había una reunión de amigos añorando el pasado mundial de fútbol y la música que le rodeaba, porque si no, esa música que ya huele a ranciuna le quita méritos al local.
No es mala música, pero resultó ser muy localizada en el tiempo y lo que antes fueron grandes éxitos, pues a dia de hoy no pegan ni con cola.
Solo había una camarera, Pili, que nos atendió muy amablemente, con un trato muy correcto y simpático.
A la hora de pagar, nos encontramos con un Ticket detallado y claro, que no da lugar a dudas.
Una sorpresa el conocer este local que añadimos a nuestra lista de San Martes.
A FAVOR:
-Buen vino
-Local acogedor
-Gran variedad en las tapas
-Relación calidad/precio
EN CONTRA:
-Selección musical mejorable
Nuestro veredicto es...





























